Top 100 canciones de la década en que no se acabó el mundo

Mientras todas las esperanzas y temores de la humanidad recaían sobre el año 2000 y su redondez apocalíptica, para muchos grandes músicos (y otros no tanto) el armagedón no era motivo suficiente para dejar de tocar. Agradecidos por eso, intentamos recopilar lo mejor y más importante de la música de nuestra generación.

Bonus 5: Las que no entraron (6)

Estamos a 5 entradas de la mitad de nuestro Top 100. Hemos tenido música de todas partes del mundo (siempre moviéndonos dentro de los géneros rockeros, punkekes, poperos y aledaños), con una constancia sin precedentes en nuestra historia bloguera. Esta es mi tercera tanda de canciones que no había donde calzar. Bonus 5:

Queens of the Stone Age - Go with the flow: Al comienzo pensé que este era un video de animación muy bien hecho. Luego descubrí que fue grabado en Inglaterra por el equipo audiovisual Shynola y posteriormente reducido a tres colores: rojo, negro y blanco. Es sexy, es violento, es rock & roll, es QOTSA.

The Zutons - Why won't you give me your love: Cuando apareció un montón de grupos con sonido garage que querían resucitar el espíritu del rock, The Zutons prefirieron no tomárselo tan en serio. ¿De qué otra forma podrían salirse con la suya haciendo este homenaje/parodia de West Side Story?

The Ataris - Boys of Summer: Los 80's se pusieron de modaotra vez en casi todas partes (That 80's Show fue lo único que no pegó). Este cover "hardcorizado" de Don Henley fue un single no previsto por la banda que se popularizó cuando una radio californiana lo empezó a rotar, y el resto es historia.

Natalia y la Forquetina - Ser humano: Natalia Lafourcade llegó, la rompió y se fue. Tuvo un debut exitoso el 2002, y para el 2005 le cede protagonismo a sus músicos de apoyo, adpotando un nombre de banda y un sonido más eléctrico. Ahora ella hace música instrumental y ellos formaron Camper.

Common y Lily Allen - Drivin' me wild: Common es un rapero afroamericano (negringo, diría yo) del que sólo sé que está activo desde 1992. Ver a Lily Allen colaborando en una pista de rap es algo difícil de asimilar, pero el estilo cool y humor cerebral de ambos hace que funcione. Y ese casco de astronauta es la vox.

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